Ciclo de la violencia

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Se refiere a la Violencia contra la mujer. El maltratador repite un ciclo de violencia. Este ciclo está compuesto por tres fases distintas que varían en tiempo e intensidad para cada pareja. Las mujeres que son violentadas no lo son constantemente, por ello es necesario considerar los dos factores que caracterizan a la violencia en la pareja: su carácter cíclico y su intensidad creciente:

1. Fase Acumulación de Tensión: En la que se reproducen una sucesión de pequeños episodios, roces permanentes entre los miembros de la pareja, incremento constante de ansiedad. En esta fase la mujer intenta manejar a su compañero a través de conductas que le han resultado exitosas antes. Debe tratar que el hombre no se enoje, si lo consigue así no habrá incidentes. Si él explota ella se siente culpable. La mujer acude a la negación. Racionaliza el abuso, lo justifica, o se lo atribuye al trabajo o al alcohol. El razonamiento de la mujer es que si espera, la situación cambiará. El agresor, apoyándose en la aparente aceptación pasiva de su conducta abusiva, no intenta controlarse. Comienza a humillar psicológicamente y sus ataques verbales son más prolongados y hostiles. Cada vez más tensión que se hace insostenible.

2. Episodio agudo de Golpes: en esta fase, toda la tensión acumulada da lugar a una explosión de violencia que varía desde un empujón hasta en homicidio. Se caracteriza por una descarga incontrolada de las tensiones que se acumularon en la fase 1. Es la fase más breve. Será golpeada no importa lo que haga. Cuando ha finalizado la etapa aguda siguen en shock, negación y descreimiento de que las cosas realmente hayan sucedido. Sufren como las víctimas de catástrofes un colapso emocional, sentimientos de indiferencia, depresión y desamparo.

3. Fase de Arrepentimiento o Luna de Miel: aquí se produce el arrepentimiento, a veces instantáneo por parte del agresor, quien se disculpa y promete que no volverá a suceder. Sabe que se le ha ido la mano. Al tiempo vuelven a recomenzar los episodios de acumulación de tensión y comienza el ciclo nuevamente. La mujer cree en la conducta que le muestra el golpeador.


Fuente

Leonor Walker (1979), "Las Mujeres Maltratadas". Nueva York. Harper and Row Publishers, Inc.