Remisión de casos
Es la suspensión del proceso penal. Es una posibilidad exclusiva del procedimiento con menores de edad y puede decidirse en cualquier momento del procedimiento. La remisión funciona a pedido del menor de edad o de sus padres, pero la decisión final es del juez. Si nadie la pide también puede decidirla el juez y se necesita el consentimiento del menor de edad, o sea, que esté de acuerdo.[1]
Es cuando se detiene temporalmente un proceso legal. Este término se usa específicamente en los casos que involucran a menores de edad. Puede ocurrir en cualquier etapa del procedimiento. La remisión se puede solicitar por el menor o sus padres, pero la decisión final la toma el juez. Si nadie solicita la remisión, el juez también puede decidirla, pero necesitará el consentimiento del menor para proceder. En resumen, es detener temporalmente un caso legal que involucra a un menor, y la decisión final recae en el juez, con consideración al consentimiento del menor. (ver fuente 2)
